Saltar al contenido principal

Equinoccio de otoño: Nueva estación, nuevos comienzos

El período de transición entre estaciones puede hacernos sentir un poco raros. El clima más fresco en mi piel me enfría un poco el alma, y ​​el té caliente y los baños tibios son mi refugio. Pero hay algo en el aire fresco, los colores brillantes y los días nublados que me brinda sensaciones extrañamente agradables y reconfortantes. No puedo evitar pensar en esto como un momento de introspección y misterio.


Descubrí que estos sentimientos no difieren mucho de lo que realmente significa esta estación. El equinoccio de otoño marca un momento de misterio, reflexión, consuelo y equilibrio. Durante el equinoccio, el sol entra en Libra, simbolizado por una balanza en equilibrio. El día y la noche tienen la misma cantidad de horas. Todo esto indica equilibrio. Aprovecha esta oportunidad para conectarte con la Tierra y armonizarte con su equilibrio.


Las hojas comienzan a cambiar de color lentamente y a caer con gracia de las copas de los árboles. Es época de cosecha y muerte, lo cual suena un tanto inquietante y misterioso, pero en realidad, el otoño refleja el ciclo de la vida de la naturaleza. El otoño abre camino a nuevos comienzos, preparándonos para el renacimiento que ocurre durante el solsticio de invierno.


A medida que el año se acerca lentamente a su fin, reflexiona sobre cómo comenzaste el 2018. ¿Cuáles fueron tus logros? ¿Tus pequeñas victorias? ¿Y tus dificultades? Permítete cosechar lo que has trabajado; tu cosecha personal, por así decirlo. Cuando llegue el solsticio de invierno, renacerás y esto pronto formará parte de ti.

 

Así que mientras estás cómodo, bebiendo té caliente, leyendo un libro o cualquier otra cosa que hagas para entrar en el espíritu del otoño, ten en cuenta que debes vivir en el momento presente. Aprovecha la oportunidad de conectarte con la naturaleza y presta atención a sus cambios sutiles.


El cambio de estaciones nos recuerda que nada está estancado y, así como la naturaleza continúa cambiando y ajustándose en su ciclo de vida, nosotros también lo hacemos.